jueves, 24 de noviembre de 2011

Como  ser amable es un principio al que no hay que renunciar. Es asi, con esta flor con la que quiero empezar, no todo son espinas, tambien hay que dar la otra cara  y sobretodo si son parabienes mucho mejor.
 Hay que esperar que al menos en lo que se trata al principio, como con los amores primeros, sean tiernos, llenos de promesas y ternuras.
Habra que esperar un tiempo, para ver y juzgar, con rigurosidad todo cuanto acontezca, no solo en el plano sociopolitico, sino tambien en lo cultural.
No hay que echar campanas al vuelo, creernos todo, pero tampoco estar con uñas y dientes preparados para lanzarse al cuello.
Un margen de confianza a los actores en escena y arriva el telon.